martes, 29 de septiembre de 2009

El luminoso camino de Pittsburgh

El domingo los periódicos publican las conclusiones de la cumbre del G-20 mantenida el sábado en Pittsburgh.

Creemos que ciertos de los puntos del documento final son de vital importancia porque establecen una tendencia temática que nos parece indispensable: del 28 al 33 el documento trata sobre seguridad energética y cambio climático, y del 34 al 42 de fortalecer el apoyo a los más vulnerables.


No es que el documento presente un acuerdo definitivo que nos conducirá a Copenhague con un consenso contundente contra el cambio climático. Pero ya es algo que el G-20 decida la eliminación de la ayudas a los combustibles fósiles - ¡si amigos! todavía nos encontramos en este punto en el cual se sigue ayudando a cierto países para que puedan mantener o incluso incrementar su consumo de petróleos y otros… es más ni siquiera se sabe a cuanto ascienden dichas ayudas y cual es su influencia en el mercado de la energía-.


Igual de vago pero alentador es el texto contenido en los 9 artículos dedicados a la ayuda al desarrollo. En el artículo 37 se habla de nuestros tan amados ODMs y se ratifica el compromiso para alcanzarlos, se trata también de la crisis de alimentos y la gestión de las ayudas y los créditos internacionales al desarrollo.

Siempre se quiere más, más compromisos, más contundencia, pero admitámoslo, el tono ha cambiado, el enfoque ha cambiado, y estas conclusiones nos hacen volver a creer que el cambio es posible.


Amigos, el sábado de inauguro el camino de Pittsburgh, que pretende ser el fin de G-8 y el principio de una nueva forma de hacer las cosas. Retumba en nuestro corazón el slogan de nuestro leader favorito “yes we can”. Si amigos, si podemos, todos juntos, quizás menos rápido de lo que nos gustaría pero sin pausa.

Lucila Rodriguez-Alarcón. Universo Vivo


Artículos del 28 al 42... para la posteridad



lunes, 21 de septiembre de 2009

Juventud ¿divino tesoro?

Cuando volvimos de Malta me sorprendió que una de las principales noticias fuera el macro botellón que tubo lugar en Pozuelo coincidiendo con la fiesta de la localidad madrileña, la mas rica de España parece ser, que había acabado en reyerta.

Ahora, un par de semanas mas tarde, todavía es sorprendente la cantidad de noticias que aparecen en Google si se meten los términos botellón+pozuelo.

Sigo sin entender muy bien porque tanto bombo rodea a este altercado. Será que como dicen algunos se ha tratado de la revolución borroka de los pijos, será que no había más noticias importantes, que los medios todavía estaban sumidos en la crisis de la vuelta al cole… el botellón de Pozuelo no solo ha sido comentando sino que ha dado lugar a un debate nacional sobre la juventud.

Me hace gracia nos empeñamos en clasificar a los jóvenes como si nosotros nunca hubiéramos sido jóvenes y no hubiéramos hecho o dejado de hacer. Que los medios se empeñen en analizar la juventud con tanta distancia prueba dos cosas:

· La primera, que se están quedando obsoletos

· La segunda, que se han olvidado de lo que ellos fueron

Es mi modesta impresión de que la juventud es muy parecida siempre. Cambian los marcos, los límites, las pautas de compportamiento pero tiene esa base común atemporal, acultural, la juventud es el in- del que ya hablé en otra de mis entradas.

Nos empeñamos en que los que vienen detrás no comentan los errores de los que les han precedido, se nos olvida que los errores son el mejor maestro que tenemos. Queremos proteger a nuestros seres queridos, y privándoles de la capacidad de errar les convertimos en seres vulnerables y débiles.

Dentro de los múltiples artículos sobre la juventud en España a los que he tenido acceso en estas dos últimas semanas me ha llamado al atención uno publicado por un antropólogo de Lleida, Carles Feixa, en la Cuarta Página de El País. Este profesor clasifica a las juventudes de todos los tiempos en tres tipos: Tarzán, Peter Pan y Blade Runners. Como siempre no os voy a contar el articulo, si queréis os lo leéis. Lo que me llamó la atención del mismo es que no lo entendí. ME lo he leído 4 veces y no se si Carles me parece un tio que no tiene ni idea de cómo funcionan los jóvenes, o si realmente me encuentro ante un brillante sistema de clasificación de los tipos de juventud.

Aun así, dicho esto, de nuevo me deja perpleja la distancia desde la que este antropólogo escribe, como si la juventud que describe no tuviera nada que ver con el ni con el mundo en el que el vive. Como si la juventud fuera un animalillo, que tiene unos comportamientos, habitats etc, propios y ajenos al resto de la sociedad.

Yo percibo la juventud como una mezcla del pasado y el presente, sublimado por la inseguridad y la inconsciencia de las edades de aquellos que la integran.

De modo que si hay botellón borroka en Pozuelo, no creo que sea porque los jóvenes son “replicantes” perseguidos por sus padres “los blade runners” sino porque sus padres posiblemente beban mucho, no respeten a su entorno y tengan un nivel cultual muy deficiente pese a ocupar puestos de responsabilidad en grandes empresas nacionales u otros.

Como vengo diciendo desde hace tiempo, la cultura es para mi solución a todos los males: la cultura como la describía mi abuela, como el conocimiento amplio, transversal, que te permite poder elegir. Sino también me quedo con la definición del RAE, más ortodoxa.

El que destruye, consume sin limite, no respeta al entorno y sobre todo, no se respeta a si mismo, no es mas que un pobre inculto, que seguramente no puede elegir. Y sin duda en el pueblo con mayor PIB por habitante de España, el nivel económico es inversamente proporcional al nivel cultural. Saquen sus conclusiones, yo ya he sacado las mías.

domingo, 13 de septiembre de 2009

De vuelta al mundo conocido

Después de una semana en otro mundo, en Malta, un país en el que durante 10 días me he podido evadir, me sentido transportada en el tiempo y en el espacio y en definitiva he sido feliz. Tanto me ha impresionado tanto este pequeño país que estoy pensando en crear un blog con información turística sobre Malta.

He vuelto con muchas ideas para próximas entradas, suponiendo que logro recordar que escribir en mi blog personal debe de ser una prioridad y encuentro el tiempo necesario para dedicárselo.

Sólo leí el periódico un día, El País, y la verdad me lo podía haber ahorrado, ya que no me aportó nada. La prensa se está destrozando a si misma. Sin embargo hay dos temas que se trataban en la editorial y en un artículo de opinión de los que hablaré en mis dos próximas entradas:

1- El futuro de la prensa escrita vs la prensa digital

2- El consumo de alcohol en los jóvenes

También quiero dedicar una entrada a como el final parece ser que le mundo no va a cambiar y que el miedo al cambio ganará la partida y sobre las cenizas del antiguo imperio que ardió en manos de los Leman Brothers hace un año, se reconstruirá otro imperio igualito igualito que el original, con ciertas salvedades pero a fin de cuentas casi clónico.

Bueno con estas firmes promesas de contenidos me despido. Como leí en un autobús maltes, que Dios os de el doble de lo que me deseéis a mi… genial.

Por cierto el tema de hoy me ha sido proporcionado por Alias Julio, el mejor dj del mundo: De Coleção Juca Chaves, Juca Chaves - Take Me Back To Piaui

martes, 1 de septiembre de 2009

El valor es enfrentarse al miedo

Tendría que estar escribiendo el libro que desde hace un año preparo con mi buena amiga Hel pero, como suele pasar con este tipo de cosas, después de tres meses sin tocar el borrador estoy con el síndrome del folio en blanco.

De modo que, en lugar de hacer lo que debo, aprovecho este momento para dedicárselo a mi tan amado pero siempre últimamente tan abandonado blog.

La semana pasada estuvimos en Ámsterdam. Durante una semana disfrutamos de una de las ciudades más típicas de los Países Bajos, de sus ventajas sin apenas sufrir sus inconvenientes porque hizo un tiempo fantástico.

La verdad es que fuimos tan felices que incluso llegamos a especular con la idea de irnos a vivir ahí…Me sentí libre con mi bicicleta, subiendo y bajando sin tener que esperar colas, pagar tickets, pegarme por un asiento o coger el coche. También me sentí libre pudiendo elegir en el supermercado entre una leche fresca entera bio o no, unos huevos bio, o no, un filete de agricultura biológica o no, unos plátanos chiquita o unos de comercio justo. Y esa libertad me hizo añorar mis años en Bruselas.

De vuelta a esta maltrecha España, donde si esto sigue así sólo quedarán ruinas de lo fuera, por las que se pegarán los mismos inútiles de siempre, lo primero que hice fue verificar las condiciones de una oferta de trabajo para dirigir una ONG en la “Venecia del norte”. Gracias a dios no cumplía los requisitos básicos para presentarme al puesto.

Y es que viendo el percal a veces me entran ganas de salir corriendo de aquí hacia otros lugares donde la lucha sea más fácil, porque admitámoslo, esto es un desastre. Lo del bio en los supermercados españoles, por lo menos en los de mi barrio, es una utopía a medio plazo, la bicicleta solo es para aguerridos y temerarios, y si ya nos ponemos a analizar seriamente las posibilidades de que nuestra clase política lidere un cambio es, como diría mi tío Jorge, “para pegarse un tiro en la bragueta”.

Pero bueno, mi amigo Jose dice que nuestro presente está compuesto de la utopía del pasado, y es cierto. Y por otro lado alguien tiene que intentar hacer algo para cambiar las cosas… de modo que aunque a veces me dé pereza, seguiré aquí torrándome en la ciudad de la puerta del Sol, cogiendo mi cercanías que tanto me enseña, y trabajando en Universo Vivo para ayudar al mundo que me rodea a que se rediseñe y se reinvente… porque además, entre nosotros, la verdad que es lo que me gusta.

Me voy a escribir el libro sobre como encontrar trabajo… que usted lo pasen bien.