Si leéis la maravillosa entrada de Pablo veréis que en realidad trata de esa permanente insatisfacción que caracteriza al ser humano, siempre hay una razón para estar triste al igual que siempre tendremos una razón para estar contentos.
Aunque resulte simplista yo siempre suelo decir que podemos elegir como queremos ver nuestra realidad. Prem Rawat, viene a decir también lo mismo, que la fuerza, o la luz como dice él, está en nuestro interior (1) y solo tenemos que buscarla y dejar que aflore. Aquellos que tengan un problema muy grave me dirán que no hay luz cuando uno por ejemplo tiene una enfermedad muy grave, o a perdido un ser querido, o no llega a fin de mes. Desde mi cómoda posición sigo pensando que siempre hay luz. Yo la vi en Birmania en la gente que casi todo lo que tenía era inmaterial, y la vi en mi amiga Muriel mientras luchó contra su cáncer, de modo que sé que existe.
Como dice Westley en la princesa prometida: “La vida es sufrimiento alteza, y aquel que diga lo contrario está vendiendo algo”, y no deja de ser cierto que la vida es “pain” y por eso llora Paris Hilton, pero una vez aceptado este hecho, se puede vivir con una sonrisa, sacándole punta a lo bello y lo especial que toda existencia siempre posee. Yo apuesto por esto, que le vamos a hacer, como dijo mi profesora Sagrario, pertenezco a una generación de neo románticos….
(1) ¿Seré yo maestro? si Jason, va por ti.